En los últimos años, causado por la crisis y la necesidad de supervivencia del mercado, han surgido una serie de malas prácticas en algunas empresas que tienen como principal objetivo el ahorro de gastos y obtención del mayor beneficio económico. Todo, pasando por alto las consecuencias de esta mala gestión para la salud y el medio ambiente.
Mala gestión de los residuos, realizando su eliminación de forma incorrecta y causando daños en el entorno y el medioambiente está generando una mala imagen en el sector que se resiente por ello. Cualquier tipo de residuo que genere una empresa, puede alterar gravemente nuestro ecosistema. Por ello se requiere para su tratamiento de especialistas que puedan reciclar, reutilizar o destruir los residuos generados bajo un control exhaustivo.
Por todo esto, es crucial la elección de la empresa correcta de gestión de residuos que cumpla con todo el reglamento, dado que incurrimos en delitos y sanciones muy graves ante la administración pública si se cometen malas prácticas. Además de hacer un daño irreparable al medio ambiente, del que somos directamente responsables.
En la era digital, la protección de la información sensible sigue siendo una prioridad crucial…